Cómo negarte a salir con alguien sin ofenderlo si la primera cita te decepcionó: 5 estrategias
Si el primer encuentro no te convenció, lo mejor es que no accedas a una segunda cita, sino que apliques estrategias para negarte, como el desinterés o las excusas creíbles
Si no quieres quedar como una mala persona, no salgas con un "no" tajante, porque siempre hay formas más amables de negarte. Crédito: Freepik
La primera cita es una carta de presentación donde el margen de error es muy bajo. Cualquier descuido, rareza o acto indebide es capaz de sepultar cualquier avance de una posible relación, lo que incluye un segundo encuentro. Pero quizás no fue del todo mal, sino que simplemente no te convencieron ante la idea de que esa persona pueda ser para ti. Si este es el escenario, te dejamos algunas estrategias con las que puedes descartar el plan de una nueva cita, sin soltar un “no” tan odioso y tajante.
5 formas de negarte a una segunda cita sin que la persona se ofenda
No des detalles sobre lo que no te gustó de la primera cita
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Por más que te pregunta o pida explicaciones, que no debería, no le ofrezcas detalles sobre los errores que quizás cometió en la primera cita (y única). Resultaría de mal gusto que apenas conociéndole critiques rasgos de su personalidad, quizás sus gustos o probablemente algunas actuaciones que tuvo.
¿Por qué no debes hacerlo? porque podría sentirse en el deseo de pedir una segunda oportunidad, que es precisamente lo que no deseas.
Muestra desinterés en los mensajes
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Digamos que es una forma “sucia”, pero no ofensiva de informarle que no estás en disposición de una segunda cita. Responder los mensajes con palabras corta, tardarte en contestar o incluso dejarle en visto bajo la excusa de estar “ocupada” quizás resulta mucho mejor que un “no quiero salir contigo” que pueda ser hiriente.
Otro método que nunca falla es tratarle con aires de amistad, de modo que sanamente se vayan esfumando sus ilusiones de querer algo más contigo.
El típico "estaré ocupada"
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Una persona que sepa captar un mensaje oculto reconoce que un “estaré ocupada” después de la tercera invitación (si no es que antes) significa que la segunda cita no ocurrirá jamás.
Para que no suene ofensivo, siempre debes anteponer un “disculpa”, “lo siento” o “lamento decir que”.
"Disculpa, estoy enfocada en mi trabajo"
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Es una manera directa de informar no solo que no estás en interés de una segunda cita, sino tampoco de intentar comenzar una relación amorosa. Una vez que le digas que estás enfocada en tu trabajo, se dará cuenta que sentimentalmente no estás disponible.
Pero vamos, que solo es una estrategia. Así que tampoco pretendas encontrarte con alguien más a los pocos días de haberle “cortado las alas”, o al menos que no se dé cuenta, porque ofrecerás una pésima imagen.
Cuando no deja de insistir
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En ocasiones nos toca lidiar con la típica persona repleta de perseverancia, esa que insiste una y otra vez, y hasta te dice que esperará lo que sea necesario para un nuevo encuentro. Si bien puedes aplicar las estrategias anteriores, lo cierto es que siempre estará allí, insistiendo e insistiendo, por lo que tienes dos opciones.
La primera es que aceptes la segunda cita y de manera sutil e inteligente le digas que no estás interesada en una relación, pero que con gusto pueden ser amigos y compartir de vez en cuando.
La segunda consiste en acceder a un salida bajo la propuesta de que que vayan otras de tus amistades. Una cita grupal es más llevadera y allí podrás convencerle de que sean amigos.
