4 calzados que “rompen” tu espalda: advierten expertos

Expertos en terapia física, podólogos y quiroprácticos afirman que la elección de cualquier calzado es fundamental para quienes sufren dolor de espalda

Cuando sientas dolor en la espalda y no has encontrado un motivo, la respuesta podría estar en el tipo de calzado que llevas.

Cuando sientas dolor en la espalda y no has encontrado un motivo, la respuesta podría estar en el tipo de calzado que llevas. Crédito: Shutterstock

En un artículo anterior, te contamos cuáles son los tipos de calzados que son muy malos para tus pies. Pero la afección puede ser aún mayor, porque hay zapatos que también pueden “romper” o dañar severamente tu espalda.

Expertos en terapia física, podólogos y quiroprácticos afirman que la elección de cualquier calzado es fundamental para quienes sufren dolor de espalda.

“El calzado adecuado favorece la alineación adecuada, distribuye el peso de manera uniforme, absorbe los impactos y mejora la función muscular, todo lo cual contribuye a reducir el dolor de espalda”, explica la coach Brittany Steindl, fundadora de BLS Physical Therapy.

Por el contrario, continúa la especialista, “sin el apoyo adecuado (del calzado), pueden desarrollarse movimientos y posturas compensatorias que provoquen dolor y problemas a largo plazo”.

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4 calzados que afectan tu espalda


Crocs y chanclas

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Aunque te parezcan cómodas, y realmente lo son para los pies, no sucede lo mismo con tu espalda. Suzi Schulman, quiropráctica de Clifton Chiros, advierte que este tipo de calzado “brinda poco o ningún soporte”.

“Mírate en el espejo cuando te los pongas y notarás que tus pies se hunden y tus rodillas se juntan”, analiza la experta.

También añade que ahora el soporte se ha distribuido a distintas articulaciones que empezarán desgastarse y muy rápidamente.


Tacones altos

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Entre las razones que los médicos apuntan para dejar de usar tacones, con tanta frecuencia, puedes sumarle el dolor de espalda que provocan.

Michael Fishkin, podólogo certificado de Northern Illinois Foot & Ankle Specialists, asegura que cualquier calzado que supere las dos pulgadas “puede crear una inclinación o punta pélvica que atasca la espalda baja”.


Zapatos de punta estrecha

3

Este tipo de diseño es frecuente en los zapatos de vestir y algunas zapatillas deportivas, pero la quiropráctica Suzi Schulman señala que podría provocar un efecto dominó en tu espalda.

Ese efecto consiste en que: “Aplastarán la parte delantera de los dedos, provocando neuromas (regeneración ineficaz de los tejidos nerviosos) y alterando la forma en la que el pie golpea el suelo, distribuyendo el peso de manera desigual”, explicó.


Zapatillas planas

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Bianca Carter, directora ejecutiva de Feet First Clinic, menciona como ejemplo de zapatillas planas las Vans y Converse, ya que ofrecen un soporte mínimo para la espalda.

“No ofrecen soporte para el arco ni amortiguación”, reitera la experta. Este tipo de calzado tampoco absorbe los impactos al caminar, protegiendo las articulaciones, lo que al final es muy malo para tu espalda.


La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.

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