Qué es el efecto «marmota» en tus citas románticas: cuando sales una y otra vez con el mismo tipo de persona
La doctora Susan Trotter, asesora de relaciones, y la psicoterapeuta Mollie Spiesman, explican en qué consiste el efecto "marmota" en el mundo de las citas y cómo te impide triunfar en tu vida amorosa
Del inglés «groundhogging», el efecto «marmota» es una tendencia que los expertos en asuntos amorosos están utilizando para referirse a alguien que, tal vez sin darse cuenta o por comodidad, siempre sale a una cita romántica con el mismo tipo de persona.
Si bien «marmota» es el nombre de una clase de roedor, el término hace referencia a la comedia romántica «El día de la marmota», de 1993 y protagonizada por Bill Murray. En la historia, él es un meteorólogo llamado «Phil» quien vive el mismo día una y otra vez, hasta que decide cambiar sus hábitos y termina enamorado de «Rita» (Andie MacDowell).
Cuando se habla del efecto «marmota» en el mundo de las citas, es con un sentido negativo o perjudicial, ya que implica que esas salidas repetitivas son infructuosas.
Sin embargo, la doctora Susan Trotter, asesora de relaciones y oradora pública, añade una clave al término: «Esperando resultados diferentes».
La experta aclara que esa tendencia reiterativa o mal perseverante «puede obstaculizar seriamente tus posibilidades» de encontrar un amor genuino. Incluso, cabría mencionar la diferencia entre una pareja «ideal» y una pareja que no se rinde.
Por qué se produce el efecto «marmota» en las citas románticas
La doctora Susan Trotter explica que proviene de una percepción de que existe un tipo de hombre o mujer que es «único» para ti. Por ejemplo, que seas médico y desees fervientemente que tu pareja también ocupe la misma profesión.
«La mayoría de las personas creen que tienen un cierto ‘tipo’ y puede resultar difícil dejar de serlo», analiza la asesora de relaciones. Si bien la familiaridad puede ser cómoda, incluso cuando es incómoda, a veces es mejor lanzarte a lo «fuera de lo común» para conseguir a alguien que valga la pena para ti.
Por su parte, la coach Mollie Spiesman, psicoterapeuta de adultos y jóvenes, explica que el problema está en la elección. Nadie te pone una pistola en la cabeza para ir a una cita, eres tú quien decide hacerlo.
Entonces, el efecto «marmota» te lleva una y otra vez a elegir lo mismo. Es como ir a un restaurante y pedir siempre el mismo platillo del menú. En las citas, es podría asociarse con «amor».
«Otros podrían seguir eligiendo socios que no pueden comprometerse, tal vez por el atractivo de un desafío. Podrían pensar: ‘Oh, lo intentaré de nuevo; esta vez será diferente’; sin embargo, el tiempo y la experiencia probablemente demuestren que ese no es el caso», explica.
Y para resolverlo, la clave es identificar el patrón, trabajarlo y luego atreverte a otro tipo de personas, incluso de citas y relaciones. Salirte del guion y optar por lo espontáneo puede hacer que tu vida amorosa sonría.