5 gestos con los que dañas la autoestima de tus hijos y no te das cuenta

Cuando tus hijos modifican repentinamente sus comportamientos, volviéndose más apáticos y cerrados, uno de los principales factores que debes analizar es tu trato hacia ellos, porque sin darte cuenta podrías estar dañando su autoestima

Gestos que dañan la autoestima de tus hijos.

Los niños y adolescentes suelen ser muy sensibles respecto a su autoestima, y un simple, pero mal gesto de tu parte, podría desbaratarla. Crédito: Shutterstock

¿Estás notando que tu hijo no es el mismo de siempre? Ya no le ves tan alegre como antes, no cuenta chistes, no juega y tampoco se expresa contigo. Seguramente, estarás alerta ante las señales de bullying, o quizás sea parte de su primera experiencia amorosa. Sin embargo, también es fundamental que analices la forma en que tú le estás tratando.

Los niños, y sobre todo los adolescentes, tienden a ser muy sensibles en su autoestima, absorbiendo todo tipo de comentarios, expresiones y comparaciones. En este sentido, revisa si alguno de tus gestos o comportamientos está desbaratando su estabilidad emocional.


Con estos 5 gestos puedes dañar la autoestima de tus hijos

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Cuando les comparas

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Una de las maneras más crueles de destruir la autoestima de tus hijos es comparándolos con otros niños. Jamás les digas frases como: «tu compañero de clases sacó mejores calificaciones que tú» o «tu primo jamás se comportaría de esa manera». ¡Esto no es sano!

La comparación solo hará que tus hijos se sientan inferiores, que no se sientan capaces de hacer las cosas bien y que otros son mejores. En especial porque se trata de ti, la persona que más confianza les debería transmitir.

Tampoco es sano que uses la comparación para que tu hijo se sienta superior a otro.

Por ejemplo: «eres mucho más inteligente que el hijo de nuestros vecinos» o «te portas mejor que todos los niños del parque». Tus hijos deben saber que cada uno es especial e importante, no hay necesidad de competir con otros.


Revisar sus tareas con gestos de desconfianza

2

Es tu responsabilidad como mamá o papá de velar porque tus hijos estén al día con sus pendientes escolares. Pero también debes enseñarles de que son capaces de estar pendientes de sus tareas y no dejarlos en vergüenza.

Por ejemplo, no le preguntes a su profesora o en el grupo de representantes del colegio si realmente anotó bien las tareas para el hogar, porque «nunca las anota» o «siempre lo hace mal». Esto dañará su confianza en sí mismo.

Tu trabajo es infundirle responsabilidad y hacerle saber que sabes que lo hará bien y que contará con tu apoyo para cualquier actividad.


Cuando les repites "no puedes"

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Jamás le inspires a tus hijos que no son capaces de lograr algo, por sencillo o complejo que sea. Si quiere aprender algo nuevo, como tocar un instrumento musical y le está costando, no le digas que «no puede» o que «lo deje así».

En ese caso, debes inspirarle la suficiente seguridad de que lo va a lograr con esfuerzo y constancia. Tus palabras influyen mucho en la vida de tus hijos, así que cuida lo que le dices.


Al amenazarlos

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Amenazar a los niños es una forma sumamente negativa de lograr que te obedezcan. Además, estos constantes regaños también hará que carezcan de criterio propio.

Si quieres que deje de jugar en el patio para que haga su tarea, debes pedírselo con autoridad y respeto, no decirle: «si no haces la tarea y dejas de jugar, no habrá postre después de comer».

Estás condicionándolo en lugar de incitarlo a que haga las cosas, sencillamente porque es lo correcto.


Cuando les pones etiquetas

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Las etiquetas negativas son argumentos que quedan grabados en la mente de tus hijos y pueden quedarse ahí para siempre. Es decir, si tú le dices: «son unos maleducados» o «parecen tontos» eso los marcará.

Mejor cambia esas etiquetas por afirmaciones tales como: «eres capaz», «eres inteligente» o «eres responsable» y notarás la gran diferencia.

Los problemas de autoestima en los niños podría afectarles en su vida como adultos, sintiéndose inferiores o insuficientes en sus relaciones, proyectos, trabajos y en todo lo que hagan. Es muy importante que, como padres, trabajes constantemente en su confianza y autoestima.


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