Mirar el agua puede sacarte de un estado de ansiedad: experta dice por qué
La doctora Natalia Azar, de Nueva York, explicó tres razones por las que el hábito de mirar el agua puede sacarte de un estado de ansiedad
El solo hecho de mirar el agua y admirar su grandeza puede convertirse en una de las mejores terapias contra la ansiedad. Crédito: Shutterstock
Si estás sufriendo de ansiedad, identificada y diagnosticada a través de señales que dictan los mismos expertos, existe un curioso hábito que puede ayudarte a calmar los síntomas: se trata de mirar el agua.
Dos investigaciones sobre este detalle, una en julio y otra el año pasado, ambas publicadas en la revista Nature, coincidieron en que el contacto con los espacios azules te permiten escapar de un estado de ansiedad y reducir el riesgo de padecer problemas de salud mental.
La doctora Natalie Azar, reumatóloga, asistente clínico desde Nueva York y colaboradora médica de NBC News, explicó las tres razones por las que mirar el agua ofrece beneficios potenciales para tu salud mental. «Si estás en una masa de agua, tu estado interno simplemente se calma», afirmó de inicio.
Asimismo, apuntó que es una sensación de paz común, pero muy pocos han podido concientizarla al momento de vivirla. «Es algo que creo que todos hemos experimentado, pero nunca hemos sido realmente intencionales», dijo la doctora Natalie Azar.
En el estudio de 2021, los investigadores encuestaron a personas en 18 países diferentes y los resultados arrojaron que quienes visitaron espacios azules con mayor frecuencia, informaron una menor angustia mental y una mayor sensación de bienestar.
Cómo mirar el agua puede sacarte de un estado de ansiedad
La sensación de asombro
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Según explica la doctora Natalie Azar, mirar el agua despierta una sensación de grandeza hacia el elemento vital que contrae tu ansiedad y tus emociones difíciles.
«Es algo más que grande que nosotros mismos y expande un poco tu mente», afirma la especialista, indicando que esto ofrece una distracción que te saca de la ansiedad.
Una experiencia sensorial relajante
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Cuando estás en presencia de un espacio azul, puedes vivir experiencias sensoriales muy relajantes, como el sonido y seguramente el olor del agua. Incluso ver tu cuerpo reflejado en el agua también te beneficia.
Otro punto interesante, destaca la doctora Natalie Azar, es que el agua o el aire pueden llevarte a recordar momentos espaciales de tu infancia. Por ejemplo, la visita familiar a una playa, imágenes que generan un estado mental positivo y relajante.
Activa la reflexión y consciencia plena
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Cuando estás mirando el agua, puedes notar su movimiento, sus colores y el ruido que produce, lo que atrae tu completa atención y permite que tu mente descanse.
El hábito activa tu poder de reflexión, te incita a la búsqueda de soluciones y te crea una sensación de bienestar que luego puedes llevarte a casa.
La doctora Natalie Azar aclaró que para disfrutar de los beneficios de mirar el agua ante un estado de ansiedad, no es indispensable que estés físicamente en un mar u océano. «El agua urbana también cuenta», afirmó la experta, haciendo énfasis en ríos, canales, piscinas y fuentes.
De hecho, estar relajado en tu propia bañera o ducha, y observar el agua, ya es parte de la terapia relajante. Finalmente, recomendó que disfrutar del hábito unas dos horas a la semana tiene un aporte valioso. «Un par de minutos todos los días ya puede marcar la diferencia», aseguró.
