Por qué las parejas prefieren tener mascotas en lugar de hijos
Tener una mascota cada vez es más frecuente entre las parejas, por lo que en muchos casos, la idea de ser padres pasa a un segundo plano por diversos motivos
Las parejas se deciden con mayor facilidad a tener mascotas en lugar de hijos. Crédito: Regina Burganova | Shutterstock
Las mascotas han sido consideradas como miembros importantes en el núcleo familiar desde hace muchos años, ya sea por acompañar a los hijos o mejorar el estado de ánimo de los padres. Sin embargo, cada vez son más las personas que empiezan a priorizar la idea de tener un perro o gato, antes que un bebé. Conoce por qué algunas personas prefieren tener mascotas en lugar de hijos.
La idea de preferir a una mascota antes que un hijo cada vez es más visible, lo cual puede relacionarse principalmente a que ya no son solo vistas como compañeros, sino como miembros plenos de la familia, lo que redefine las creencias tradicionales sobre la vida adulta y la formación del hogar.
Los perros y gatos, siendo las mascotas más comunes, no son consideradas como un «reemplazo», sino que existen múltiples motivos que pueden llevar a las personas a tomar esta decisión, mientras postergan la idea de convertirse en padres.
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Motivos por el que las personas prefieren mascotas en lugar de tener hijos
1.- Dedicación de las mujeres al ámbito laboral

El sociólogo y psicoanalista Wlaumir Souza explicó en una entrevista con BBC Mundo que el fenómeno conocido como «pet parenting» cada vez es más común, debido a la etapa de la vida que puedan estar atravesando las mujeres, especialmente si se dedican a sus carreras profesionales.
“El cambio de niños a mascotas va acorde al momento actual que vivimos. Tener un hijo requiere mucho tiempo y esfuerzo, lo que puede conllevar ciertas dificultades en la promoción profesional de las mujeres, dado que muchas de ellas abandonan el mercado laboral para cuidar de sus hijos y luego ese regreso sigue lleno de retos. Muchas veces no pueden volver a trabajar”, dice Souza.
2.- Situación económica
Tener un bebé y criarlo puede representar un gran gasto para una pareja, principalmente cuando no poseen grandes ingresos o no cuentan con una planificación a largo plazo, debido a que tendrán que enfocarse en su alimentación, cuidado, vivienda y educación.
Muchas relaciones no están preparados para este impacto, por lo que prefieren tener un perro para incluir un nuevo miembro en su familia, que aunque también conlleva gastos, resultan significativamente más asequibles y manejables.
3.- Mayor libertad y flexibilidad

Aunque una mascota amerita de atención y cariño, la realidad es que no llega a compararse con las necesidades y requerimientos que tiene un bebé, principalmente en lo que respecta a dedicar tiempo y cambiar planes para atenderlo.
Algunas parejas prefieren priorizar la libertad y flexibilidad, lo cual podría traducirse en viajes juntos, dedicarse a pasatiempos o simplemente disfrutar del tiempo personal o en pareja, sin pensar en las responsabilidades que implica la paternidad, debido a que pueden dejar a sus mascotas al cuidado de otras personas.
Preferir tener un perro en lugar de un hijo, no es la realidad de todas las parejas, ya que no «reemplaza» sino que ocupa un nuevo puesto en la familia, por lo que aún existen relaciones que mantienen la idea de tener un hijo bajo la estructura tradicional de familia.
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