Cómo enseñarle hábitos de higiene a los niños

La limpieza es la base de la buena salud, y los niños conocerla a tiempo, por lo que les compartiremos cómo enseñarles los hábitos de higiene básicos

Los niños deben aprender los hábitos de higiene básicos para su día a día.

Los niños deben aprender los hábitos de higiene básicos para su día a día. Crédito: PeopleImages.com - Yuri A | Shutterstock

La higiene es uno de los hábitos más importantes que una persona debe mantener en su día a día, lo cual se vuelve una costumbre con el paso del tiempo. Sin embargo, en el caso de los niños puede resultar más delicado, ya que ellos apenas están aprendiendo sobre la limpieza personal y cómo hacerla. Por ello, en esta ocasión te compartiremos cómo enseñarle hábitos de higiene a los niños.

El portal de salud Healthline explica que «Todos los días, entras en contacto con millones de gérmenes y virus externos. Pueden permanecer en tu cuerpo, y en algunos casos, pueden enfermarte. Las prácticas de higiene personal pueden ayudar a prevenir enfermedades. También pueden ayudar a que te sientas bien con tu apariencia».

Por este motivo, resulta de suma importancia que los niños aprendan cómo mantener la limpieza y cuidar su cuerpo, contribuyendo de forma positiva en su desarrollo general y calidad de vida, a corto y largo plazo.

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¿Cómo lograr que los niños desarrollen hábitos de higiene?

Enseñar hábitos de higiene a un niño pequeño puede convertirse en una tarea difícil, aunque resultará de suma importancia para que logre desarrollar una rutina saludable, fomentar su autonomía y enseñar la responsabilidad que conlleva el cuidado propio.

Existen muchos hábitos de higiene que un niño debe aprender a lo largo de su desarrollo, aunque los más importantes son:

1.- Cepillarse los dientes

Los niños deben cepillar sus dientes al menos dos veces al día.
Los niños deben cepillar sus dientes al menos dos veces al día.
Crédito: Bohdan Malitskiy | Shutterstock

El primer hábito que deben aprender los niños es cepillarse los dientes, ya que esto les permitirá mantenerlos blancos y limpiar los alimentos acumulados, así como prevenir la aparición de caries y enfermedades de las encías.

Para desarrollar esta costumbre, enséñale que los dientes deben limpiarse al despertar y después de cada comida, demostrándole cómo debe desplazarse el cepillo en la zona superior, inferior, muelas y lengua. Acompaña esta práctica con una canción para que sea más divertido para el pequeño.

2.- Lavarse las manos

Los niños suelen tocar muchas superficies cuando empiezan a desarrollar sus sentidos del tacto, lo cual puede favorecer que sus manos siempre estén sucias y puedan acumular diferentes bacterias en ellas.

Resulta importante enseñarles a lavar sus manos después de tocar zonas sucias, ir al baño, acariciar una mascota o antes de comer, ya que esto ayudará a prevenir la propagación de gérmenes y enfermedades. Las manos deben lavarse durante 20 segundos, por lo que puedes pedirles que cuenten en voz alta para que también practiquen los números.

3.- Limpiarse después de ir al baño

Los niños deben aprender cómo ir al baño por si solos.
Los niños deben aprender cómo ir al baño por si solos.
Crédito: Lopolo | Shutterstock

Cuando los niños están muy pequeños, los padres se encargan de limpiarlos después de ir al baño, aunque con el tiempo deben enseñarles a que lo hagan por si mismos, para que desarrollen autonomía y adopten este hábito de higiene.

Para ello, muéstrales cómo deben ir solos, la forma en que bajan su ropa interior y se sientan, cómo se dobla el papel y la forma en que debe usarse después de hacer popo. Además, no olvides que deben acostumbrarse a lavarse las manos después de ello.

4.- Bañarse todos los días

Otro de los hábitos importantes que los niños deben adoptar es bañarse todos los días, ya que esta es una regla básica de la higiene que permite mantener el cuerpo limpio, evitando los malos olores y la proliferación de gérmenes o bacterias.

Ensénale el uso de cada producto, es decir, cómo se aplica el shampoo y acondicionador en el cabello, así como el jabón en cada zona de su cuerpo, teniendo cuidado con los ojos y la boca.

Con el tiempo, el niño aprenderá otros hábitos, como la importancia de limpiarse la nariz, cortarse las uñas, limpiar sus orejas, asear los pies y más, aunque en sus primeros años de vida estas serán tareas de los padres.

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