JLo se divorcia de Ben Affleck: ¿Sufre síndrome de Penélope?
En la búsqueda de una explicación sobre los constantes divorcios de JLo, surge el curioso síndrome de Penélope y una idealización de la pareja
Sí, lo hizo de nuevo. Tras dos años de relación, en la segunda temporada de «Bennifer», y justo cuando el calendario marcaba el segundo aniversario, BANG: Jennifer López se divorcia de Ben Affleck. Según La Opinión, la cantante de 55 años le solicitó el divorcio al actor, sumando la cuarta separación matrimonial de su vida.
Presuntamente, los elogios que la «Diva del Bronx» lanzó al artista, en medio de su boda en Las Vegas, con una carta pública en su boletín «On the JLo», fueron aprovechados por Affleck para asumir un comportamiento humillante.
«Jennifer dijo que estaba cansada de ser humillada por Ben y esperó hasta el segundo aniversario porque quería herirlo», dijo una fuente al Daily Mail. «Pero a él no le dolió. Ya hace tiempo que él está acabado y en el fondo ella lo sabe», continuó la fuente.
Sin embargo, pese a que miles de fans tienen el corazón roto, una vez más, lo que llama poderosamente la atención es la aparente incapacidad que tiene JLo para sostener un matrimonio. Muchos dicen que, al haberse casado y divorciado de tantos hombres, el «problema» tiene que ser ella.
La intérprete de «El Anillo» se casó con el productor Ojani Noa, en febrero de 1997, y se divorció 11 meses después. Seguidamente, en 2001, contrajo matrimonio con el bailarín Cris Judd, separándose luego en 2003.
Para 2004 se casó con Marc Anthony, su relación más duradera y en la que tuvo sus dos hijos, Max y Emme. En julio de 2011 anunciaron la separación, siendo noticia mundial.
Y en 2022 caminó al altar con Ben Affleck. Cabe destacar que en 2002, cuando se emparejaron por primera vez, cancelaron los planes de boda, cuatro días antes del evento. Algo similar ocurrió con el exbeisbolista Álex Rodríguez, que también le puso un anillo de compromiso.
¿Jennifer López padece el síndrome de Penélope?
En la búsqueda de una explicación sobre los constantes divorcios de JLo, tomando en cuenta que, desde la perspectiva psicóloga, ella podría ser más responsable que sus parejas, surge el curioso síndrome de Penélope.
Su nombre proviene de la canción «Penélope», de Joan Manuel Serrat, y consiste en la idealización de un hombre por parte de las mujeres. Incluso, el tema describe esa situación emocional.
En ciencia cierta, los expertos dicen que son aquellas mujeres que subliman al hombre, convirtiéndolo en príncipe azul. Seguidamente, lo cubren de expectativas que no son reales, de modo que, al pasar el tiempo, ese hombre idealizado no cumplió los objetivos, se desilusionan y lo dejan.
Las expectativas suelen ser una «trampa del amor», ya que al no cumplir con dichas expectativas, es probable que la mujer intente cambiar al hombre, algo que probablemente no suceda. Allí inician los problemas, discusiones y la frustración.
Llama la atención que, en la mayoría de sus relaciones, por no decir todas, Jennifer López es quien al final solicitó el divorcio o anunció la separación. No cabe duda de que es una mujer hermosa y deslumbrante, incluso a sus 55 años, pero cuando se trata del matrimonio, ha coqueteado con lo insólito.
La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.