Qué es más efectivo para bajar de peso: ¿Correr o nadar?
Expertos aclaran que ambos métodos son fantásticos para quemar calorías y bajar de peso, pero entre correr y nadar hay diferencias que debes considerar
Anteriormente, te contamos cuál actividad física era más efectiva para bajar de peso, entre caminar y correr. Sin embargo, ahora comparamos el hábito de correr con un ejercicio de baja o mediana intensidad: nadar, con el objetivo de verificar cuál puede ayudarte a perder kilos más rápido.
Expertos dejan claro que ambos métodos son fantásticos para quemar calorías. Correr bombea tu corazón y trabaja las piernas, mientras que nadar involucra un alto número de músculos de todo el cuerpo. De hecho, la natación es considerado uno de los ejercicios más completos.
El gasto calórico es clave para bajar de peso, pero hay otros beneficios adiciones que puedes obtener de cada actividad física. Por ejemplo, correr mejora tu sistema cardiovascular y la densidad ósea, además de elevar tu estado de ánimo por la liberación de «hormonas de felicidad».
Por su parte, la natación es ideal para las articulaciones, corregir lesiones y dolores. También fortalece los músculos, ofrece agilidad y es una gran opción durante el verano, para escapar del calor.
Nadar es más relajante, pero igual de efectivo que correr
Es irrefutable que nadar o correr para bajar de peso depende de los gustos de cada persona. ¿Te gusta calzarte zapatillas o ponerte un traje de baño? Además, la actividad acuática necesita un requisito fundamental: saber nadar.
Ante ese escenario, es probable que optes por correr, ya que su alta intensidad estimula los músculos de tal forma que acelera la quema de calorías. Sin embargo, también es un ejercicio de mucha técnica para no caer en lesiones, en rodillas, tobillos y talones.
Por otro lado, nadar te otorga un entrenamiento de cuerpo completo, con una ventaja significativa: no te machaca las articulaciones. Esto lo convierte en una actividad relajante pero efectiva para quemar calorías.
«La naturaleza de bajo impacto de la natación se vuelve preferida para quienes se recuperan de lesiones o buscan una opción de ejercicio que no dañe las articulaciones», se lee en el portal Eat This.
Toma en cuenta también que el correr pone a prueba la prueba y resistencia de la parte inferior del cuerpo, mientras que la natación desafía gran parte de tus músculos, esculpiendo de la cabeza a los pies. Y respecto al riesgo de lesiones, nadar es la alternativa más viable para evitarlas.
Los expertos recomiendan que combines ambos ejercicios, dependiendo del día, gustos y capacidades. Y fundamental: recuerda que la actividad física requiere de cumplir otros hábitos, como la alimentación saludable y dormir la cantidad de horas necesarias para que tu cuerpo se recupere.
La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.