Razones de por qué tu cuerpo cambia cuando reduces la cafeína
A los adultos se les recomienda que no consuman más de 400 miligramos de cafeína al día, lo que es igual a cuatro tazas de café
Es un hecho que una taza de café, incluso si estás enfermo, puede relajarte y animarte, pero no implica que vaya a curarte un resfriado. Crédito: Shutterstock
Ciertamente, cuando dejas de consumir cafeína, hay un exceso de receptores a los que el cuerpo responde.
Están las adenosinas que se pueden adherir al cuerpo y generar una sensación de fatiga y el cansancio, que resultan normal como parte del efecto.
Las jaquecas también son el resultado del síndrome de abstinencia que puede durar entre cinco y seis horas después de consumir la cafeína.
De hecho, la mitad de la cantidad ingerida permanece en el organismo y pueden pasar diez horas o más hasta que se elimine por completo del torrente sanguíneo.
Incluso tomándola solo en las cantidades recomendadas, la cafeína puede afectar la buena salud del sueño.
¿Qué beneficios tiene dejar de tomar café?
Una mayor hidratación: el café es una sustancia diurética, es decir, ayuda en la pérdida de líquidos, por lo que a mayor cantidad de café tomes, mayor será tu deshidratación.
Una vez dejes de tomarlo, tus niveles de agua volverán a ser normales, impidiendo que tu cuerpo se seque a la velocidad que lo hacía antes.
Qué pasa en el cuerpo cuando tomamos café
Es cierto que cuando consumes cafeína, tu cuerpo la absorbe rápidamente, alcanzando su máximo efecto en dos horas (aunque podría tomar hasta nueve horas para eliminarla).
También es soluble en agua y grasa, así que penetra todos los tejidos del cuerpo, lo que explica por qué puede afectar tantas partes de tu organismo.
A los adultos se les recomienda que no consuman más de 400 miligramos de cafeína al día (aproximadamente cuatro tazas de café).
Más que eso podría generar temblores musculares, náusea, jaquecas, fuertes latidos del corazón y hasta la muerte (en casos extremos con patologías médicas).
Pero aún las personas que sólo consumen un par de tazas de café o té al día podrían sentir efectos adversos, como irritabilidad, dificultad con el sueño y nerviosismo.
Por eso un número creciente de personas están optando por dejar la cafeína.
¿Cómo reducir el consumo de café?
- Disminuir la cantidad. Lo primero que se debe hacer ante esta decisión es disminuir la cantidad de tazas al día.
- Combinarlo con leche. Es una manera de reducir el consumo de la sustancia tan pura o fuerte.
- Beber descafeinado. Cambia tu café con cafeína por uno descafeinado.
- Cambiar el café.
¿Qué pasa cuando se deja de tomar café?
Aumento de la sed o del volumen de orina. Frecuencia o ritmo cardíaco irregular. Convulsiones o confusión.
¿Qué beneficios tiene dejar de tomar café?
Una mayor hidratación: el café es una sustancia diurética, es decir, ayuda en la pérdida de líquidos, por lo que a mayor cantidad de café tomes, mayor será tu deshidratación.
Una vez dejes de tomarlo, tus niveles de agua volverán a ser normales, impidiendo que tu cuerpo se seque a la velocidad que lo hacía antes.
¿Qué puedo tomar para reemplazar el café?
Si el problema no es la cafeína, podemos tomarnos un té verde con menta, un té negro con limón… Se trata de diferentes opciones de terminar una comida con una bebida calentita.
Las infusiones, y si son digestivas aún mejor (manzanilla, infusión de hinojo, infusión de menta, etc.) también son una alternativa.
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