Mi novia es ninfómana: qué puedo hacer
Una mujer ninfómana es aquella que está dominada psicológicamente por una conducta sexual compulsiva, lo que le convierte en una adicta al sexo
Aunque la idea de estar con una ninfómana te parezca atractiva, después de un tiempo notarás que no es agradable ni placentero. Crédito: Shutterstock
Una mujer que siempre esté dispuesta a tener relaciones sexuales parece ser el deseo de todo hombre, sin embargo, ese anhelo se fuga de la realidad cuando te topas con una ninfómana. Clínicamente, no es calificada como una enfermedad, sino como una conducta sexual compulsiva.
El equipo de expertos de Mayo Clinic también le define como «hipersexualidad» o «adicción sexual» y consiste en una «preocupación excesiva por fantasías, impulsos o conductas sexuales difíciles de controlar». Generalmente, solo se asocia a las mujeres.
Imagina tener una novia o esposa que jamás se sacie sexualmente, que quiera más y más, llevando al límite tus capacidades y queriendo suspender o interrumpir cualquier otra actividad para sostener nuevos encuentros sexuales.
Los expertos sugieren que la ninfomanía produce «angustia general» en esa mujer, afectando negativamente otros aspectos de su vida, como el trabajo, la familia, las relaciones interpersonales y la parte romántica (no sexual) de un noviazgo o matrimonio.
En el caso de los hombres, que también podría ocurrir, no se le llama «ninfomanía», sino «satiriasis». En este escenario, tu pareja podría desear tener sexo contigo todos los días (¡No es broma!).
Si tienes una novia ninfómana, lo primero es que detectes los síntomas y el más fundamental es la adicción al sexo. Algunos signos son: fantasías e impulsos sexuales recurrentes, usar el sexo como una medicina o terapia y el sentimiento de culpa o remordimiento después de haber pedido y cumplido con un encuentro íntimo.
Por qué se produce la ninfomanía
De acuerdo a Mayo Clinic, existen al menos tres razones que están asociadas al cerebro:
Desequilibrio químico-cerebral: ocurre cuando algunos neurotransmisores, como la serotonina y dopamina, están muy elevados, produciendo los impulso sexuales incontrolables.
Cambios en las vías cerebrales: cuando la mujer atraviesa por un encuentro sexual que fue muy placentero, puede haber una «reconfiguración» de las vías cerebrales, lo que le lleva a una necesidad constante de recibir nuevamente esos estímulos sexuales. Es un motivo muy curioso.
Trastornos que afectan al cerebro: cuando una mujer padece demencia, síndrome de Parkinson y epilepsia, la conducta sexual puede verse afectada, debido a esos trastornos cerebrales, haciendo que su perspectiva sexual se vea alterada.
La recomendación médica es que la persona asista a una revisión psicológica, de modo que se pueda diagnosticar la ninfomanía y comenzar un tratamiento para revertir esas conductas. De lo contrario, puede haber depresión severa, cuadros de ansiedad y el riesgo de contraer infecciones de transmisión sexual, debido a la necesidad de sexo con parejas no estables.
La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.
