Limpieza sueca de la muerte: 5 consejos de expertos para deshacerte de lo innecesario

Si estás considerando comenzar a deshacerte de las cosas que ya no usas y vivir una vida más simple, la limpieza sueca de la muerte puede ser una buena manera para hacerlo

Limpieza sueca de la muerte

Si bien es una práctica concebida para las personas mayores, quienes pueden encontrar terapéutico y reconfortante, revisar todas sus pertenencias y reasignarlas a otros familiares o personas necesitadas, lo mejor es comenzar cuanto antes. Crédito: Pexels

La limpieza sueca de la muerte es una práctica escandinava y estilo de vida que adopta principios minimalistas y que te puede ayudar a deshacerte de cosas que ya no usas. Te decimos 5 consejos de expertos para deshacerte esas cosas innecesarias a las que te aferras.

Muchos suecos consideran la primera mitad de su vida como una oportunidad para acumular riqueza, conocimientos y activos; y la segunda mitad de su vida como una forma de distribuir ese valor adecuadamente, a los lugares y personas correctas.

Además, en la cultura sueca, se considera de mala educación imponer inconvenientes, como ordenar, a los demás una vez que dejamos de estar presentes. Por lo que en la “segunda mitad de la vida” se debe despejar y dejar ir las cosas que no puedes “llevarte contigo”.


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La práctica surge de la autora sueca Margareta Magnusson en su libro The Gentle Art of Swedish Death Cleaning: How to Free Yourself and Your Family From a Lifetime of Clutter.

Entonces, si estás considerando comenzar a deshacerte de las cosas que ya no usas y vivir una vida más simple, la limpieza sueca de la muerte puede ser una buena manera para hacerlo. Estos son los 5 consejos de expertos para realizarla sin mayores inconvenientes.

1. Empieza tan pronto puedas

La idea es ordenar tu vida antes de morir para liberar la carga de los seres queridos que dejas atrás. Si bien es una práctica concebida para las personas mayores, quienes pueden encontrar terapéutico y reconfortante, revisar todas sus pertenencias y reasignarlas a otros familiares o personas necesitadas, lo mejor es comenzar cuanto antes.

En el caso de que tengas muchas pertenencias acumuladas, comienza de a poco para que no te sientas demasiado abrumado con el proceso.

2. Hazte preguntas importantes

La entrenadora de organización Ella Engström expuso a Insider la importancia de hacer todo este proceso con intención y responder algunas preguntas vitales antes de desechar todo.

Engström sugirió que para decidir si algo se queda o se va debes preguntarte si has usado ese artículo en el último año. ¿Cuál es la probabilidad de volver a comprar este artículo? ¿Realmente recordarías si lo tuvieras dentro de unos meses o años? Si no tienes un “sí” claro a estas preguntas, es un “no”, dijo.

3. Todo debe tener su lugar

En función de hacer que la limpieza sueca de la muerte sea efectiva y sustentable, las cosas que decidas conservar deben tener un lugar o espacio dentro de la casa.

Katarina Blom, experta en los aspectos psicológicos de este método de limpieza, indicó al medio que es importante tener en cuenta el poder del lado emocional de por qué estás evitando la organización a medida que te acostumbras a volver a poner las cosas donde corresponde.

4. Apóyate en códigos de colores

Para que las decisiones sobre los artículos sean más sencillas, puedes usar un código de colores, ya que visualmente los elementos marcados puede aclarar las cosas y puede ayudarlo a ser más consciente.

Por ejemplo, puedes usar rojo, para las cosas que no son tan importantes; y verde, para aquellas indispensables que deseas conservar.

5. Los objetos de los cuales no estás seguro/a, ponlos a prueba

Poner a prueba la necesidad de una prenda o artículo es tan sencillo como meter todas estas pertenencias indeterminadas en una caja, sellarla y dejarla en un lugar lejos de la vista por un mes.

Pasado este tiempo, haz una lista con todas las cosas que estás dentro, que sientes que te hicieron falta. Las que no hayas mencionado o que hayas olvidado, es hora de botarlas, donarlas o venderlas.

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