Nunca des bebidas con cafeína a tus hijos: por qué
El Gobierno de Estados Unidos no tiene pautas oficiales sobre el consumo de cafeína para niños
El café es una bebida sagrada para la mayoría de las personas, pero ¿se puede considerar segura para los niños? La respuesta sencilla es que no. Te decimos por qué.
Los expertos recomiendan que los niños menores de 12 años de edad deben abstenerse de la ingesta de cafeína, debido a que son más sensibles que los mayores porque sus cerebros aún se están desarrollando.
No significa que tu hijo no crecerá, sino que tendrá los efectos de la cafeína más amplios y de manera más intensa.
El exceso de cafeína no es bueno para nadie, puede causar problemas como aumento de la ansiedad, aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial, además de reflujo ácido y trastornos del sueño.
Entre los efectos negativos que tu hijo podría experimentar por consumir cafeína:
1- Empeoramiento de las funciones cognitivas: lo que significa una menor comprensión del vocabulario y habilidades de lectura, sobre todo en niños de 9 y 10 años.
2- Consumir calorías vacías por el azúcar por lo que es posible que no obtengan suficientes vitaminas y minerales que necesitan para desarrollar huesos fuertes. Además, de la propensión de la obesidad, enfermedad cardíaca y problemas cardíacos.
3- Dependencia: los niños que consumen mucha cafeína pueden tener síntomas de abstinencia, como dolores de cabeza, baja energía o irritabilidad, si de repente dejan de tomarla.
El Gobierno de Estados Unidos no tiene pautas oficiales sobre el consumo de cafeína para niños. No obstante, el Dr. Mehul Patel, pediatra del hospital Memorial Hermann, desaconsejó en declaraciones a Insider darle una taza de café normal a sus hijos hasta que tengan 16 años o más.
Ahora, ¿es el café descafeinado una opción para darle café a tu hijo? No tampoco es una buena idea, porque igual puede tener cafeína en su contenido y por ende ser objetivo de sus efectos.
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