Toxoplasmosis: cómo saber si mi gato tiene el parásito y qué tratamiento puede curar la infección
La toxoplasmosis es transmitida por el parásito 'toxoplasma gondii', que portan algunas aves y ratas
Lo primero que debemos aclarar en este tema es que la toxoplasmosis no es una enfermedad propia de los gatos ni tampoco proviene de sus pelos, como erróneamente se llega a pensar. Pero lo que sí es cierto es que los felinos son el huésped más propenso para contraerla, pese a que pueden infectarse muchos otros animales y el ser humano.
En su definición más exacta, la toxoplasmosis es una infección que se transmite a través del parásito toxoplasma gondii. Por lo general lo portan algunas aves y ratas, y ya que el gato es un animal con instinto cazador, se contagia por vía oral al entrar en contacto con los tejidos y heces de estos animales. Sin embargo, también existe posibilidad de que la gata madre lo transmita a sus bebés, lo que se denomina transmisión transplacentaria.
Evidentemente cuando tu mascota porta este parásito entramos en riesgo de contraerlo, pero solo a través de sus heces al momento de recogerlas.
A menos que haya sido por transmisión transplacentaria, si tu gatito es casero y no tiene necesidad de salir a cazar, es muy poco probable que se exponga. En caso de que orine y evacúe en un patio del hogar, debes estar atento si otros gatos callejeros también lo hacen, pues elevaría el riesgo.
Te puede interesar: Mi gato maúlla mucho: cómo saber lo que quiere según los sonidos que hace
Cómo saber si mi gato tiene toxoplasmosis
De acuerdo al portal Affinity Petcare, la sintomatología «depende del ciclo en el que se encuentre el microorganismo». El primero es el ‘enteroepitelial’, donde el parásito invade y se replica en el interior de las células epiteliales intestinales. En este fase los signos son más leves, provocando vómitos y diarreas, sobre todo en gatos de corta edad.
Si tu mascota presenta estos síntomas y no tienen ninguna relación con su alimento y crianza, es pertinente que se le lleva lo más pronto posible con un veterinario. La idea es evitar que la toxoplasmosis avance a un ciclo más grave, que es el extraintestinal.
Para este momento de la infección se produce una necrosis celular como consecuencia de la replicación de los taquizoitos, detalla el sitio web. Estos son formas mótiles (organismos unicelulares que se movilizan de forma independiente) y forman los pseudoquistes en los tejidos infestados por el parásito.
Cuando esto ocurre, tu gato puede experimentar disnea, tos, ictericia (coloración amarilla en la piel, ojos y mucosas), fiebre, dolor muscular, pancreatitis, encefalitis, cojera, uveítis (inflamación ocular) y retinocoroditis (inflamación de las coroides y la retina).
Qué tratamiento cura la infección de toxoplasmosis en tu gato
Al tratarde es una infección evidentemente debe tratarse con antibióticos. De acuerdo al Affinity Petcare, el fármaco convencional que se aplica en estos casos es la clindamicina, muy efectivo contra distintos tipos de bacterias y parásitos, en los que se encuentra el toxoplasma gondii.
Aunque depende del alcance que tiene la infección en tu gatito, lo más recomendable es administrárselo durante 30 días. Sin embargo, los expertos indican que los síntomas oculares y neurológicos requieren de corticoides tópicos o sistémicos como medicamento alterno.
También te puede interesar: Cómo eliminar las pulgas de tu gato con remedios caseros