6 olores que pueden salir de tu vagina y cuándo deberías preocuparte
La doctora Alyssa Dweck, obstetra y ginecóloga con sede en Nueva York, describió los distintos olores que pueden percibirse en una vagina, siendo unos completamente normales, y otros que tal vez deberían preocuparte
Los olores vaginales forman parte de tu salud íntima, así que no te avergüences de ellos, siempre que lleves una buena higiene y evites hábitos que causen infecciones. Crédito: Shutterstock
Aclaratoria: una vagina no huele a rosas, amapolas, mandarinas o frutillas, a menos que te hayas aplicado una fragancia química externa y ya por allí empezamos mal. La realidad es que puedes adquirir varios olores naturales, gracias a las bacterias, la higiene, el sudor, el ciclo menstrual y hasta tu dieta.
La doctora Alyssa Dweck, obstetra y ginecóloga con sede en Nueva York, describió los distintos olores que pueden percibirse en una vagina, siendo unos completamente normales, y otros que tal vez deberían preocuparte. Sin embargo, lo más importante es que detectes la señal para acudir con un ginecólogo.
6 olores vaginales y cuáles pueden preocuparte
Orina
1
Es uno de los olores más típicos porque, bueno, de una vagina, sale orina.
«En algunos casos, las pérdidas de orina o una mala higiene en el baño pueden provocar un olor genital parecido al amoníaco», dice la experta.
Sin embargo, cuando el olor se intensifica al nivel del amoniaco, podría tratarse de una infección de tracto urinario. En este caso, es necesario descartar o confirmar con un especialista.
Café
2
Buenas noticias. La doctora Laura Purdy, directora médica de Wisp, aclara que este aroma significa que «tus lactobacilos están haciendo su trabajo y manteniéndote saludable».
Ojo, no es un aroma a latte vainilla ni mokaccino, se trata del ligero ácido del café.
Metálico
3
Es la palabra más acertada para indicar la presencia de sangre. La ginecóloga Alyssa Dweck indica que esto solo significa una cosa: tu menstruación.
No tienes nada de qué preocuparte, también puede ocurrir después de un encuentro sexual y no tiene que ver con infecciones ni absolutamente nada.
Vinagre o ajo
4
Pudiera tratarse de un desequilibrio en el pH vaginal, que proviene de los lactobacilos. En este caso, es importante que atiendas las causas de la alteración del pH, puesto que necesitas uno que sea ácido para combatir las infecciones bacterianas.
«Este olor también puede verse influenciado por lo que has estado comiendo últimamente, especialmente si has comido ajo o vinagre», dice la doctora Laura Purdy.
A menos que el olor sea extremadamente fuerte o sientas incomodidad, no es un escenario del que debas preocuparte.
Pescado
5
Aquí es donde comienza lo negativo, porque el olor a pescado podría ser un signo de vaginosis bacteriana. Es el escenario más típico.
Sin embargo, la doctora Alyssa Dweck advierte que también pudiera tratarse de una infección de transmisión sexual llamada tricomoniasis y que es causada por un parásito. Generalmente, viene acompañado de picazón, secreción y dolor al orinar.
En ambos casos, vaginosis bacteriana o tricomoniasis, es importante que acudas con un ginecólogo para iniciar un tratamiento con antibióticos.
Levadura
6
Mala noticia: candidiasis o infección vaginal por hongos. La doctora Alyssa Dweck señala que podrías sentir picazón y experimentar secreción blanca y espesa.
En algunos casos, el olor es como a levadura, pero en otros más severos, es realmente fétido.
«Es mejor consultar a un médico para aclarar si esto podría ser un signo de candidiasis, y de ser así, es probable que su médico le recete un medicamento antimicótico», explicó la doctora Laura Purdy.
Cada vez que tengas la oportunidad, evalúa el olor de tu vagina para saber que todo marcha bien. Por supuesto, hazlo después de asearte y asegurándote de que no haya restos de fluidos como el semen. En caso de que percibas olores extraños y fuertes, no dudes en acudir con un ginecólogo especializado.
La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.
