5 razones de peso, para no darle café a los niños, según expertos
Los niños no deben tomar café
Los niños son más susceptibles a los efectos de la cafeína y, por lo tanto, esta sustancia, tomada en exceso, causa nerviosismo, irritabilidad, insomnio, e incluso taquicardia y palpitaciones. Crédito: Halfpoint | Shutterstock
La Fundación Mapfre asegura que los niños no deben tomar café dada la cantidad de cafeína, sustancia estimulante en el cerebro que origina otros muchos efectos.
Desde el sitio web no se recomienda el consumo en edad infantil. La cafeína tampoco debe tomarse en los refrescos, como en las bebidas de cola.
Se explica que “los niños son más susceptibles a los efectos de la cafeína y, por lo tanto, esta sustancia exceso causa nerviosismo, irritabilidad, insomnio, e incluso taquicardia y palpitaciones”.
Además, los niños pueden desarrollar trastornos con dosis muy inferiores pero constantes. La cafeína no se recomienda para los mayores ni para los niños en general, sino que su consumo está reservado a la etapa adulta.
Efectos negativos del café en los niños
Un estudio realizado en 2015 entre madres de Boston descubrió que el 14% de las familias encuestadas permitían a sus hijos de 2 años beber entre 1 y 4 media taza de café por día.
El estudio también descubrió que el 2,5% de las madres daba café a sus hijos de 1 año.
La Academia Estadounidense de Pediatría recomienda que los niños menores de 12 años no tomen bebidas con cafeína, incluyendo café, té, refrescos, bebidas deportivas u otros productos.
Mientras que los adolescentes de entre 12 y 18 años deben limitar su consumo a menos de 100 miligramos al día, más o menos el tamaño de una taza de café regular.
Pero no se trata solo del café. Una botella de bebida deportiva puede contener casi 250 miligramos de cafeína según la marca, según una investigación de Consumer Reports.
Una taza de té puede tener hasta 47 miligramos, mientras que un refresco dietético puede tener 46. El chocolate también tiene algo de cafeína, y la cantidad aumenta a medida que el color del chocolate se oscurece.
Un puñado de granos de café cubiertos de chocolate puede tener 336 miligramos de cafeína, según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
Incluso se pueden comprar chicles, caramelos de menta, gomitas y barritas energéticas con cafeína, además de los helados de café.
Los niños no son pequeños adultos
Como los niños suelen tener un tamaño corporal más pequeño, se necesita menos cafeína para perjudicar su funcionamiento.
“Los niños acuden a urgencias con un ritmo cardíaco irregular o taquicardia”, dice el pediatra Dr. Mark Corkins, presidente del comité de nutrición de la Academia Estadounidense de Pediatría.
“A algunos les parece bien dar a los niños pequeños un refresco”.
Los límites se basan sobre todo en el tamaño del cuerpo, y esos límites aumentan cuando el niño ha crecido lo suficiente como para poder metabolizar la cafeína más fácilmente.
Sin embargo, si un niño es pequeño para su edad, o tiene migrañas, problemas cardíacos o convulsiones, puede ser aún más sensible, según la Academia Estadounidense de Psiquiatría Infantil y Adolescente.
