Cómo hacer tu propio ambientador casero, con sal, alcohol y suavizante de ropa
La coach Elizabeth Grace, bloguera y fundadora de Dream Home Making, explicó cómo hacer tu propio ambientador casero, que además de ser efectivo, te evita gastar dinero en productos que tal vez tienen químicos
El ambientador casero puedes mantenerlo en un recipiente, en lugares estratégicos de la casa, o aplicarlo discretamente con un atomizador. Crédito: Shutterstock
Ahora que comienzan las festividades para despedir el año, como Thanksgiving, Navidad y Hanukka, es seguro que quieras mantener tu hogar limpio, ordenado y con un detalle muy importante: que huela delicioso. Hoy vamos a enseñarte a hacer tu propio ambientador casero, con la ayuda de una experta.
La coach Elizabeth Grace, bloguera y fundadora de Dream Home Making, compartió el truco en sus redes sociales, que además de ser efectivo, te evita gastar dinero en costosos ambientadores.
Según ella, el efecto aromático puede permanecer durante horas, siendo superfácil de laborar y con ingredientes que probablemente tengas en casa: sal, alcohol isopropílico (un poco) y suavizante de ropa.
Cómo hacer tu propio ambientador casero
Vas a necesitar: un recipiente (preferiblemente de vidrio), el alcohol, sal marina gruesa y tu suavizante de ropa preferido.
El primer paso es que agregues la sal, hasta que el recipiente quede repleto, luego arroja una cucharada de alcohol y finalmente una tapa del suavizante con aroma.
Ahora debes mezclar estos ingredientes y ubicar el recipiente en un lugar estratégico de tu hogar, de modo que el aroma quede impregnado. Los resultados serán inmediatos y duraderos.
También puedes poner un poco del ambientador en una botella con atomizador, aplicando en algunas zonas de la casa, pero siempre apuntando hacia abajo y preferiblemente en los rincones. No rocíes hacia arriba, porque corres el riesgo de que te entre en los ojos ni apuntes a un objeto que pueda mancharse.
«Más allá de su simplicidad, lo que distingue a este bricolaje es su longevidad», aseguró Elizabeth Grace.
Asimismo, la coach reiteró que al combinar el suavizante con la sal, además de crear una deliciosa fragancia, esta se adhiere a las superficies por un período largo.
«Esta longevidad no solo lo hace rentable, sino que también elimina la necesidad de una reaplicación frecuente, un testimonio de su practicidad», destacó.
Recordó que otra ventaja del ambientador es que existe una gran cantidad de suavizantes con diferentes aromas, por lo que puedes elegir tu favorito sin problema.
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La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.
