Cómo congelar y conservar de forma correcta el tomate para futuras preparaciones cocidas
Los tomates pueden congelarse crudos de tres formas: enteros, picados o en jugo, y el tiempo que podrán permanecer en ese estado será un máximo de dos meses
El tomate se congela y conserva con muy buenos resultados en su forma cruda para hacer futuras preparaciones cocidas, como salsas para pastas, refiere el libro Los secretos de la congelación de alimentos. No obstante, para consumirlo en ensaladas, no se recomienda helar, porque pierde su textura original.
Existen diferentes formas para congelar el tomate crudo: enteros; picados en dos o cuatro partes; sólo la pulpa, que se extrae con la ayuda de un cedazo o se licúa sin agregar agua y si se desea se cuela; o en jugo, que se saca con un extractor, señala el libro.
Los pasos a seguir para cualquiera de estas cuatro formas de congelar son los siguientes:
- Se escogen tomates frescos en el estado de maduración que se desee; se lavan, se secan, se les quita el pezón y si tienen alguna parte dañada también se les quita.
- Se preparan de cualquiera de las cuatro formas que se desee congelar como ya mencionamos. Para congelar las preparaciones de tomates enteros o picados se envasan en bolsas plásticas N°1, se extrae el aire lo mejor posible, se cierra herméticamente con una liga y si prefiere dar mayor protección utilizar la bolsa N°2, se marca y se congela. Las preparaciones de pulpa o jugo se congelan en recipientes plásticos tapados herméticamente, los cuales se marcan para congelar.
¿Cómo descongelar los tomates para preparaciones cocidas?
Si se le quiere quitar la piel a los tomates congelados enteros o picados en trozos grandes, se recomienda pasarlos rápidamente por el chorro de agua, que ayuda a desprenderla con facilidad.
Se deja descongelar lo mínimo, para poderlo picar y se incluye congelado en la preparación donde se va a agregar, la cual debe estar muy caliente y así se obtendrá excelentes resultados como si fueran tomates frescos.
Las preparaciones de pulpa o jugo se pueden descongelar como se prefiera, con aplicación de calor o en forma natural (nevera o a temperatura ambiente).
¿Cuánto tiempo puede permanecer el tomate crudo en el congelador?
El tomate congelado crudo en cualquiera de sus formas pertenece al primer grupo de alimentos, delicados, por lo que puede permanecer en el congelador un máximo de 2 meses, si tu heladera es de dos puertas, si es de una, un máximo de 1 mes.