Cómo actuar si tu hijo arma un berrinche en público
Existen maneras de sobrellevar la situación sin que se escape de las manos y ofreciendo la enseñanza que el infante necesita
Se echa al suelo, empieza a llorar sin parar y parece que tu día entero se sale de control por unos instantes. Los berrinches de los niños suelen ser unos de los momentos más complicados para los padres, en especial cuando los manifiestan públicamente.
Aunque este comportamiento no es el más aceptable, es muy común cuando están entre los 3 y 5 años. Son parte de su crecimiento y de conocer lo que está bien y lo que está mal.
La experta en desarrollo infantil, Claire Lerner, afirma que en estos episodios es importante que los padres mantengan la calma e ignoren a las personas que están presente. Manejar un berrinche con paciencia y amor es fundamental.
Imagina este escenario: vas al supermercado con tu hijo y le compras un chocolate, pero él quiere llevar la caja completa. Al negarte, inmediatamente su drama. Este es uno de los escenarios concretos, pero no te preocupes, porque al menos una vez nos ha pasado a todos.
Incluso es natural que los padres sientan temor de que en cualquier momento, frente a personas desconocidas, su hijo pequeño estalle en llanto, causando vergüenza y frustración ante los demás.
“Naturalmente esto pone a la mayoría de los padres en un lugar cargado de emociones, sintiéndose avergonzados y a menudo enojados con su hijo, por ponerlos en esta situación profundamente incómoda y estresante”, analizó Lerner para Phychology Today.
4 consejos vitales si tu hijo arma un berrinche en público
1) Que los demás no te incomden
Siempre estarán aquellas personas que te comprenden porque tienen hijos y les ha pasado, pero también están los espectadores que repentinamente son los «mejores psicólogos» infantiles del mundo… y te juzgan. Creen que podrían manejar la situación mucho mejor que tú.
La clave para esto es ignorar. No permitas que el pensamiento de los demás te afecte, maneja la situación con paciencia y concéntrate en el momento con tu hijo.
2) No pierdas la amabilidad
Si algún extraño quiere decirte cómo actuar, no reacciones de manera negativa contra él. Sobre todo si se trata de un comentario que realmente no aporta nada.
En cambio, trata de explicarle que aprecias su disposición de “ayudar”, pero que estás bien. Puedes decirle: “Para los niños es difícil entender que no pueden tener todo lo que quieran ¿cierto?».
En pocas palabras le harás saber que tienes el control de la situación y le estás enseñando a tu hijo sus límites. Esto también aplica también con familiares que en el momento quieran opinar.
3) Ten paciencia y calma
Claire Lerner afirma que “si estas ansioso y molesto, es más probable que su hijo se sienta ansioso y molesto». Por el contrario, una actitud serena ayuda a que se recomponga más rápidamente”.
Responder de forma brusca o intolerante a un berrinche, solo hará que las cosas se compliquen aún más. Aunque es una situación estresante debes mantener la calma a toda costa para solucionar el episodio.
4) No menosprecies sus sentimientos
Tu hijo debe saber que no estás de acuerdo con su comportamiento, pero que sí comprendes sus sentimientos. “Sé que estás molesto porque quieres la caja de chocolates, comprendo que estés decepcionado”, es una de las frases que según la experta podrías intentar.
El problema no es que quiera más chocolate, sino su reacción al no recibirlos. De allí la importancia de enseñar a los pequeños a manejar sus emociones fuertes de la mejor manera. Eso les servirá para toda la vida.