Cuán saludable es beber agua con gas: expertos lo aclaran
Dos gastroenterólogos y una nutricionista aclaran cuán saludable es que tomes agua con gas, un hábito que dependerá de tu salud digestiva
Estados Unidos se posiciona como uno de los países con mayor consumo de agua con gas. Otras naciones como Chile, Italia y Francia también prefieren tomarla gasificada, sin embargo, pocos se han preguntado si es realmente saludable, en comparación con el agua sin gas.
Distintos estudios y expertos apuntan que dependerá principalmente de la persona que la consuma, pero en líneas generales, el agua con gas no suele causar efectos negativos en la salud.
El doctor Kenneth Brow, gastroenterólogo certificado en Texas, explica: «El agua con gas puede tener efectos tanto positivos como negativos en la salud intestinal, dependiendo de la sensibilidad individual y del tipo de agua con gas consumida».
Por su parte, el doctor Peter Stein, certificado en gastroenterología y medicina interna, y director de endoscopia del Hospital Northern Westchester, en Nueva York, acota que aunque el agua gasificada tiene potencial de causar molestias intestinales, la mayoría de las personas no las sienten.
«El agua carbonatada puede provocar reflujo en personas con enfermedad de reflujo gastroesofágico e hinchazón, gases y diarrea en personas con síndrome del intestino irritable», añade la doctora Kaytee Hadley, dietista nutricionista registrada en Richmond, Virginia.
En estos casos, ella aclara que no suele prohibirse el consumo, pero sí es vital que no excedas en la cantidad y frecuencia. Es importante que aprendas a «escuchar» tu cuerpo e identificar si realmente la tolera.
El agua con gas también aporta algunos beneficios
Quienes no padecen de ningún trastorno o enfermedad digestiva, consumir agua con gas también tiene su lado positivo para la salud. Así lo asegura el gastroenterólogo Kenneth Brow.
El experto dice que, además de ayudar con el proceso de digestión, podría aliviar síntomas como gases e hinchazón debido a que estimula los eructos.
«También puede mejorar la hidratación y beneficiar la salud intestinal en general, especialmente para aquellos que tienen dificultades para beber suficiente agua», agregó.
En definitiva, si no tienes problemas digestivos, tomar agua con gas no supone algún efecto perjudicial. Por el contrario, es recomendable que consultes con un médico, antes de consumirla, si padeces molestias estomacales, o la descartes por el agua normal.
La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.