Mistletoe: De dónde viene la tradición navideña de besarse bajo el muérdago
Si dos personas que se gustan se encuentran bajo el mistletoe tendrán que darse un beso, sino tendrán mala suerte en el amor
Las tradiciones navideñas de Estados Unidos han sido ampliamente documentadas y escenificadas en producciones audiovisuales de Hollywood, por lo que aunque no se celebran en América Latina tampoco resultan tan extrañas. Una de ellas es el beso bajo el muérdago.
Si dos personas que se gustan se encuentran bajo el mistletoe tendrán que darse un beso, sino tendrán mala suerte en el amor. Aunque esta tradición es muy popular, la historia de la planta y cómo se incorporó a la tradición navideña anglosajona no es tan conocida.
¿Qué es el muérdago?
El muérdago es un arbusto semiparasitario, nativo de Europa y del Asia occidental, meridional y también de América.
Su fruto son dos tipos de bayas: unas rojas y otras blanquecinas traslúcidas que al madurar en otoño, tienen un jugo pegajoso denominado liga. Cuando los pájaros lo comen, intentan desprenderse de su semilla frotando el pico en las ramas de los árboles, donde queda depositada para iniciar su germinación.
Europa celta
Para los druidas celtas, el muérdago es un símbolo sagrado de vivacidad y fertilidad porque lo veían florecer en los árboles durante los duros inviernos.
Le atribuían poderes mágicos a esta planta, creyendo que otorgaba la vida y la fertilidad, protegía contra el veneno y era un afrodisíaco.
Los druidas solían llevar muérdago a sus celebraciones del solsticio de verano y de invierno. Algo que luego terminó por ser la costumbre de decorar las casas en Navidad con muérdago en una evolución de estas tradiciones.
El muérdago en el Medioevo
Para la Edad Media las ramas de muérdago tomaron una connotación más mística y se empezaron a colocar sobre las puertas de las casas y establos con la intención de evitar la entrada de las brujas y de los espíritus malignos.
La historia de la diosa Frigga
La mitología nórdica relata que cuando Balder, hijo de Odín, era apenas un niño, su madre, Frigga, diosa del amor y la belleza, tuvo un sueño en el que se le alertaba sobre su muerte.
Por ello, habló con los cuatro elementos y todo ser viviente, haciéndoles prometer que nada ni nadie le haría daño a su hijo. Sin embargo, se le olvidó acercarse al muérdago por considerarlo muy joven, insignificante e inofensivo.
El dios Loki utilizó una lanza con punta de muérdago que mató a su hijo haciendo realidad la profecía que la diosa había soñado. Lloró desconsolada y condenó al muérdago a ser una planta parásita y dependiente de otras plantas para vivir. Los dioses al ver su desdicha se reunieron para regresar a la vida a Balder, quién como muestra de amor y agradecimiento decidió liberar del maleficio a la planta.
A partir de ese momento, cada vez que una pareja pasara bajo una rama de muérdago, se besaría para perpetuar su amor en la Tierra y para la posteridad.
Interpretación escandinava
Los escandinavos creían que el muérdago era una planta de paz, por lo que, cuando iban a declarar la tregua al enemigo, se ubicaban bajo esta planta.
A partir de ello, también lo utilizaban las parejas para cuando resolvían sus problemas matrimoniales.
Luego, se empezó a creer que el ritual de besarse bajo el muérdago traería salud, fertilidad y posibilidades de compromiso para las jóvenes parejas.
Besarse bajo el muérdago
La tradición de los besos tal como la conocemos en la actualidad parece haber comenzado en la Inglaterra del siglo XVIII. Allí se utilizó por primera vez como decoración navideña.
La tradición se extendió rápidamente por todo el mundo con la carga significativa de toda su historia: la paz y la fertilidad a través de un beso bajo el muérdago.
Sigue leyendo:
Cómo festejar la Navidad en Estados Unidos si eres latino: 7 tradiciones a las que puedes sumarte